MADRID,
El Obispo de Astorga (España), Mons. Juan Antonio Menéndez, ha pedido "humildemente perdón" por el caso de abusos sexuales cometidos por un sacerdote contra varios alumnos en el seminario menor durante el curso 1988-1989.
El Obispo de Astorga, León, ha publicado a través del sitio web del Obispado un comunicado sobre el caso de abusos sexuales contra menores por parte del sacerdote José Manuel Ramos Gordón.
En la nota se subraya que "la Iglesia diocesana lamenta profundamente estos hechos tan deplorables, moralmente inaceptables y reprobables, que han repercutido de manera negativa en la imagen de la Iglesia".
Además "reitera humildemente perdón por el daño causado a la víctima, a la que expresa una vez más su apoyo y cercanía" y manifiesta también "su dolor por el daño causado a la sociedad y el compromiso firme con la justicia y con la salvaguarda de la infancia y la juventud". El Prelado se refirió a una de las víctimas, que fue quien sacó el hecho a la luz al escribir una carta al Papa Francisco en 2014.
En el comunicado se explica que cuando el Obispo tuvo conocimiento de los hechos, se "siguieron los protocolos establecidos para estos casos", y que a pesar de "la prescripción civil y canónica de los hechos ocurridos hace 28 años, la Congregación para la Doctrina de la fe levantó la prescripción canónica para que se pudiera realizar un proceso administrativo penal en la diócesis que verificara la veracidad de los hechos".
Una investigación que concluyó con la imposición al sacerdote "de la pena pertinente que aceptó con espíritu de humildad y arrepentimiento". De esta manera, el sacerdote "pidió la jubilación de todos sus cargos" y desde entonces no tiene ninguna responsabilidad eclesial.