A punto de celebrar la Navidad, las múltiples ocupaciones y preocupaciones pueden desviarnos del auténtico significado de esta festividad. Por esta razón, te invitamos a leer esta carta como si estuviera escrita por el Niño Jesús, con la esperanza de que te ayude a recordar dónde reside la verdadera alegría en esta fecha tan especial.
Querido Amigo:
Hola, te amo mucho. Como sabrás, nos estamos acercando otra vez a la fecha en que se festeja mi nacimiento.
El año pasado hicieron una gran fiesta en mi honor y me da la impresión que este año ocurrirá lo mismo. A fin de cuentas, llevan un tiempo haciendo compras para la ocasión y casi todos los días han salido anuncios y avisos sobre lo poco que falta para esta celebración.
La verdad es que se pasan de la raya, pero es agradable saber que por lo menos un día del año, piensan en mí. Ha transcurrido ya mucho tiempo cuando comprendían y agradecían de corazón lo mucho que hice por toda la humanidad.
Pero hoy en día, da la impresión de que la mayoría de la gente apenas sabe por qué motivo se celebra mi cumpleaños.