VATICANO,
Luego de la Audiencia General del miércoles, el Papa Francisco hizo un llamado a la paz y al diálogo en la República Democrática del Congo, donde la negativa del presidente Joseph Kabila a abandonar el poder, una vez finalizado su mandato, amenaza con desatar una guerra civil.
"A la luz de un reciente encuentro que he tenido con el Presidente y el Vicepresidente de la Conferencia Episcopal de la República Democrática del Congo, dirijo nuevamente un encarecido llamado a todos los congoleños para que, en este delicado momento de su historia, sean artífices de la reconciliación y de la paz", dijo el Papa.
El Santo Padre llamó a "aquellos que tienen la responsabilidad política de escuchar la voz de su conciencia, a ser conscientes del cruel sufrimiento de sus compatriotas y a trabajar por el bien común".
Al mismo, tiempo, Francisco quiso "garantizar mi apoyo y mi afecto al amado pueblo de ese país. Invito a todos a dejarse guiar por la luz del Redentor del mundo, y rezo para que la Natividad del Señor abra caminos a la esperanza".
La República Democrática del Congo está atravesando unos días de graves disturbios en las calles de sus ciudades, principalmente en la capital, Kinshasa, tras la negativa del Presidente Joseph Kabila a cesar en su cargo el pasado lunes 19 de diciembre, como le obligaba la Constitución.
Según denunció la ONU, al menos 26 personas murieron el martes 20 a manos de las fuerzas de seguridad durante los disturbios en Kinshasa.