MADRID,
Los vecinos de Callosa de Segura en Alicante, España, impidieron de nuevo el retiro de la cruz de la plaza donde está colocada. Después de que una multitudinaria concentración evitara por primera vez que sacaran el símbolo religioso, el Ayuntamiento envió en la mañana del viernes 16 de diciembre una grúa, pero no logró su objetivo.
En esta ocasión los vecinos no se encadenaron sino que rodearon la cruz cantando villancicos, todo siempre de manera pacífica.
De esta manera los vecinos han impedido de nuevo que el Ayuntamiento aplique de manera errónea y aletatoria la Ley de Memoria Histórica.
La cruz tiene en su base 80 nombres de vecinos de la localidad que "fueron asesinados durante la Guerra Civil por sus ideas".
Desde el ayuntamiento de esta localidad alicantina, gobernado por el Partido Socialista, Izquierda Unida y Podemos, partidos políticos de izquierda y extrema izquierda, se pretende transmitir la idea de que esos nombres eran de combatientes del bando franquista, cuando en realidad no es así.