Según Google, la palabra "aborto" (en inglés, "abortion") fue la palabra más buscada con relación a Donald Trump y Hillary Clinton el 8 de noviembre, el día de la elección presidencial en Estados Unidos. El ganador, Trump, parece haber tomado nota al nombrar a líderes provida para importantes cargos en su próximo gobierno.
Se trata de Mike Pence, Jeff Sessions, Nikki Halley, Betsy DeVos y Ben Carson, además del próximo Secretario de Servicios Humanos y de Salud (HHS), Tom Price.
En septiembre de este año, durante la campaña electoral, Trump se comprometió con los provida de Estados Unidos en cuatro puntos clave, entre ellos "nombrar jueces provida para la Corte Suprema de Estados Unidos" y "firmar la Ley de Proyección del Niño por Nacer Capaz de Sentir Dolor", presentada en la Cámara de Representantes de Estados Unidos en junio de 2016, y que prohibiría la mayoría de abortos realizados pasadas las 20 semanas de gestación.
Otros compromiso firmado por el presidente electo de Estados Unidos son "cortar el financiamiento a Planned Parenthood mientras sigan realizando abortos" y reasignar los más de 500 millones de dólares que recibe esta organización "a centros de salud comunitaria que brindan atención médica integral a mujeres".
Planned Parenthood es la multinacional del aborto más grande del mundo. Desde mediados de 2015 enfrenta acusaciones de traficar con órganos y tejidos de bebés abortados en sus instalaciones en Estados Unidos.
La cuarta promesa de Trump fue hacer que la enmienda Hyde, que evita que fondos públicos financien abortos, con excepción de casos de incesto y violación, se convierta en ley permanente "para evitar que los contribuyentes tengan que pagar por abortos".