BUENOS AIRES,
El Obispado de San Isidro en Argentina informó que la Santa Sede declaró el pasado 16 de noviembre la dimisión del P. Cristian Gramlich, "quedando privado de todo ejercicio del ministerio sacerdotal". La diócesis por su parte pidió perdón a las víctimas de los abusos cometidos por el ahora exsacerdote y expresó su deseo de reparar y promover una cultura de protección de menores.
El comunicado emitido el 2 de diciembre señala que en marzo de 2012, el Obispo de San Isidro, Mons. Oscar Ojea, recibió información "referida a comportamientos graves e indebidos" del P. Cristian Gramlich que en ese momento era párroco de Santa Rita, localidad de Boulogne, y director pastoral del colegio Juan XXIII.
Si bien las víctimas no quisieron iniciar una investigación judicial, el Obispado de San Isidro se puso "inmediatamente a disposición de los denunciantes y cumpliendo con las normas de la Santa Sede se iniciaron los procedimientos previstos por la Iglesia para examinar esas conductas", indica el comunicado.
Mientras se desarrollaba la investigación preliminar, Mons. Ojea apartó de sus labores al P. Gramlich. En mayo de 2013 a partir de nuevos antecedentes, se le prohibió realizar confesiones además de ser expulsado de la diócesis de San Isidro.
En 2014 el presbítero comenzó a realizar algunos servicios ministeriales en la Diócesis de San Martín y actualmente se encuentra no habido. Esta diócesis y la de San Isidro señalaron a ACI Prensa que no conocen el paradero de Gramlich.
"En nombre de la comunidad diocesana de San Isidro y de modo especial de sus obispos y sacerdotes, expresamos el pedido de perdón a quienes han sido afectados por estas conductas", citó el texto.