VATICANO,
El Jubileo de la Misericordia terminó el domingo 20 de noviembre, pero el Papa Francisco ha querido agradecer la labor de todos los que han trabajado en él en una audiencia en la que participaron muchos de los que han ayudado en el Año Santo.
El Pontífice reconoció que "ha sido un año denso, lleno de iniciativas para toda la Iglesia, donde se ha podido ver y tocar con la mano los frutos de la misericordia de Dios".
"La mía fue una simple intuición cuando expresé el deseo de un Jubileo de la Misericordia, nunca hubiera pensado, sin embargo, que el Señor lo fuese a convertir en una realidad y que, sobre todo, se pudiera celebrar con tanta fe y alegría en las comunidades cristianas esparcidas por el mundo".
Francisco aseguró "que ha sucedido algo verdaderamente extraordinario que ahora requiere ser inserido en la vida de cada día para poder convertir la misericordia en un compromiso y un estilo de vida permanente para los creyentes".
El Obispo de Roma agradeció el servicio a las autoridades de Roma, así como a la Gendarmería vaticana, a la Guardia Suiza, la policía y a los voluntarios.
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