VATICANO,
En audiencia este 17 de noviembre con el Patriarca de la Iglesia Asiria de Oriente, Catholicos Gewargis III, el Papa Francisco expresó su dolor por la violencia que siguen sufriendo los cristianos en Medio Oriente, y señaló que la "sangre de los mártires es la semilla de la unidad de los cristianos".
El Santo Padre se manifestó "consternado por todo lo que continúa sucediendo en Oriente Medio, en especial en Irak y en Siria", donde "cientos de miles de niños inocentes, mujeres y hombres sufren la terrible violencia de un conflicto sangriento que no tiene ninguna motivación ni puede justificarse o permitirse".
Francisco lamentó que "en esas tierras, nuestros hermanos y hermanas cristianos, además de los fieles de diversas minorías religiosas y étnicas, están acostumbrados a sufrir grandes pruebas diariamente".
El Papa aseguró que la sangre de los mártires no se derrama en vano. "En medio de tanto dolor encontramos cada día a muchos cristianos que recorren la vía de la cruz siguiendo los mismos pasos de Jesús uniéndose a Él que, con su cruz, nos ha reconciliado", dijo.
"Estos hermanos y hermanas –continuó– son un modelo que nos anima en cada circunstancia a permanecer fieles al Señor, para abrazar su cruz, para confiar en su amor". Los mártires, dijo, "nos indican que en el centro de nuestra fe siempre está la presencia de Cristo que nos invita, incluso en la adversidad, a no cansarnos de vivir su mensaje de amor, de reconciliación y de perdón".
"Esto es lo que aprendemos de los mártires y de cuantos todavía hoy, incluso a costa de su vida, permanecen fieles al Señor y con Él vencen al mal con el bien. Al igual que la sangre de Cristo, derramada por amor, ha reconciliado y unido, haciendo germinar a la Iglesia, la sangre de los mártires es la semilla de la unidad de los cristianos. Nos llama a avanzar de la caridad fraterna a la comunión".