VATICANO,
El Papa Francisco recordó, en el transcurso del ángelus en la plaza de San Pedro, a los cuatro monjes benedictinos mártires asesinados en 1936 durante la Guerra Civil Española, y beatificados ayer en Madrid.
"Alabemos al Señor y confiemos en la intercesión ante Él de los hermanos y hermanas que, por desgracia, incluso hoy en diversas partes del mundo sufren persecución por su fe en Cristo", dijo el Pontífice.
Los 4 monjes benedictinos del monasterio de Santo Domingo de Silos (Burgo) elevados a los altares son: P. José Antón Gómez, P. Antolín Pablos Villanueva, P. Rafael Alcocer Martínez y P. Luis Vidaurrázaga González.
Durante la homilía pronunciada por el Cardenal Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, en la celebración oficiada en la Catedral de la Almudena de Madrid, recordó que los cuatro monjes "fueron fusilados en su patria a sangre fría, no por ser malhechores, sino por ser sacerdotes. ¿Cómo fue posible que hombres mansos e inocentes hayan sido brutalmente maltratados y asesinados?".
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