LONDRES,
Debido a su "extraordinaria vida y virtudes" la Congregación para la Causa de los Santos otorgó a la Madre Adele Garnier el título de Sierva de Dios, y con ello se abre oficialmente su causa de beatificación.
La Madre Adele Garnier fundó la Congregación Benedictina de las Adoratrices del Sagrado Corazón de Jesús de Montmartre el 21 de junio de 1867. Llevó una vida marcada por el sufrimiento físico y espiritual, tuvo visiones de Cristo, y vivió la agitación política de su época.
De acuerdo con un informe de The Catholic Herald, el P. Gianmario Piga escribió una biografía espiritual de la Madre Adele (2012) en la que se relató la historia de un milagro eucarístico presenciado por la religiosa.
En una carta al P. Charles Sauvé, la religiosa recordó el momento en que vio al Santísimo Sacramento convertirse en carne y sangre. "En el momento en el que el sacerdote tomó una hostia consagrada y la puso en el cáliz, alcé los ojos para adorarla y contemplarla".
"Oh, si tú pudieras saber lo que vi y cómo me siento conmovida e impresionada aún por esta visión. Los dedos del sacerdote no sostuvieron un pedazo de hostia blanca, sino una hostia de un rojo llamativo, con el color de sangre pero luminosa al mismo tiempo... Los dedos del sacerdote estaban de color rojo a la derecha de la hostia, era una mancha de sangre que parecía todavía húmeda", relató.
Las religiosas de su congregación intentaron abrir la causa beatificación canonización de la Madre Adele durante 20 años, pero la falta de fondos se los impidió.