BUENOS AIRES,
El Arzobispado de Tucumán (Argentina), desmintió las informaciones divulgadas ayer en los medios de que el Papa Francisco había enviado dos personas para averiguar la causa de la muerte del P. Juan Heraldo Viroche, cuyo cuerpo fue hallado en la casa de la parroquia Nuestra Señora del Valle el 5 de octubre.
Ayer miércoles medios argentinos informaron que Gustavo Vera, legislador de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y presidente de la Fundación La Alameda; y el abogado Mario Baudry se entrevistaron con el ministro de gobierno de Tucumán, Regino Amado y con el fiscal Diego López Ávila, aduciendo que eran enviados directos del Papa Francisco para ver la causa de la muerte del sacerdote.
"El Señor Arzobispo advierte que las personas mencionadas no cuentan con el aval ni del Santo Padre, ni del Nuncio Apostólico, ni del suyo propio", señaló el Arzobispado en su comunicado emitido ayer 12 de octubre.
El texto indicó que ante las informaciones divulgadas en los medios, Mons. Zecca "tomó contacto telefónico inmediatamente con el Señor Nuncio Apostólico (Mons. Emil Paul Tscherrig), quien, a su vez, habló al Vaticano y se comunicó directamente con Su Santidad el Papa Francisco, el cual, en dicha comunicación, ha desmentido categóricamente que él haya enviado a éstas o a cualquier otra persona para presentarse en su nombre".
En ese sentido, el Arzobispado de Tucumán también aclaró que la convocatoria a una reunión para ayer a las 6pm en el Colegio León XIII, a la que, supuestamente, asistirían catequistas, maestros de religión, sacerdotes vinculados a la pastoral social y la hermana del P. Juan, ha sido "realizada por los autoproclamados enviados papales".