MADRID,
El Papa Francisco aceptó la renuncia que Mons. Javier Salinas, Obispo de Mallorca (España), había presentado hacía algunos meses después de estar al frente de la diócesis insular durante cuatro años. Ahora pasa a ocupar el cargo de Obispo Auxiliar de la diócesis de Valencia.
Mientras que el Santo Padre designe un nuevo Prelado que sustituya a Mons. Salinas, el actual Obispo Auxiliar de Barcelona, Mons. Sebastià Taltavull, se hará cargo de la diócesis de Mallorca de manera provisional como Administrador Apostólico.
Mons. Salinas llegó a la diócesis de Mallorca (España) en noviembre de 2012, este cambio de diócesis y de cargo se produce después que el Prelado tuviera que responder ante el Prefecto de la Congregación para los Obispos, Cardenal Marc Ouellet, sobre la supuesta "relación impropia" que el Prelado habría sostenido con su secretaria, Sonia Valenzuela.
El caso trascendió en diciembre de 2015 cuando el exesposo de Valenzuela interpuso una denuncia ante la Nunciatura Apostólica en Madrid, el Obispado de Mallorca y la Santa Sede por una supuesta "interferencia matrimonial" del Obispo y de mantener una "relación impropia" con la que entonces era su esposa.
Entre la información del caso trascendió que ambos podrían haber intercambiado anillos con el nombre del otro. Tanto el Obispo Salinas como Sonia Valenzuela han negado siempre los hechos.
En su carta de despedida a los diocesanos de Mallorca, Mons. Javier Salinas agradece al Papa que haya aceptado su renuncia, una decisión que, según precisa tomó "libremente, después de haber orado al Señor y asistido por el consejo de personas de criterio humano y eclesial, mirando lo mejor para la diócesis".