ROMA,
Jessica es brasileña y Szymon es polaco. Se conocieron en la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Río de Janeiro en 2013, y se comprometieron durante la reciente JMJ realizada en Cracovia.
Ellos compartieron su historia con Radio Vaticano en español. La pedida de mano ocurrió luego de la celebración de una Misa en Polonia.
"Estábamos en la misa en latín, aquí en la Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia con el grupo Juventutem y tras finalizar, mi novio, a quien conocí en la JMJ de Río de Janeiro, me pidió la mano", cuenta Jessica.
"Estoy súper nerviosa y emocionada pero muy feliz y muy contenta con Dios por esta bendición porque es muy importante tener un noviazgo santo y casto", añade.
La joven brasileña afirma que "en el mundo donde la familia no es tan valorada es importante tener esta base católica, tener siempre a Dios y contar con la intercesión de Nuestra Señora".
"Quiero decirle a todos los jóvenes que es muy importante creer siempre en Dios, creer que Dios siempre hará todo y poner toda nuestra confianza en Él", concluyó.