REDACCION CENTRAL,
Varios testigos de un hospital en los Estados Unidos aseguraron que un hombre "volvió a la vida" luego que un sacerdote tocó el escapulario de la Virgen del Carmen que el fallecido llevaba en el pecho.
La historia del hombre irlandés fallecido con el escapulario de la Virgen, que recuperó sus signos vitales y tiempo después acudió al sacramento de la confesión con el P. John Higgins, de la iglesia San Ramón Nonato de California, fue recogida por el periodista Joseph Pronechen en un artículo para el National Catholic Register.
Según Pronechen, el P. Higgins le narró en una entrevista que el suceso inexplicable médicamente ocurrió cuando colaboraba en otro templo, la iglesia San Rafael en Santa Bárbara, también en California.
"Después de una Misa con un grupo de adultos jóvenes y una barbacoa entre amigos, el padre recibió una llamada de emergencia del hospital", narra el periodista.
El P. Higgins fue llevado al hospital de Goleta Valley. Al llegar, no supo quién estaba postrado sobre la camilla a la que lo llevaron porque la cortina estaba corrida, pero sabía que la enfermera a cargo de emergencias se llamaba Anne. Ella y su familia eran miembros de su parroquia, y ella lo llamaba siempre ante emergencias de este tipo en el hospital.
"Anne dijo: 'Oh, padre, llegó muy tarde'. Los especialistas empezaron a retirar los cables del monitor de frecuencia cardiaca. Me acerqué al hombre tendido y dije: 'Oh, él tiene un escapulario marrón, tiene colocado un viejo escapulario'. Lo toqué y de repente hubo un pitido. Anne dijo: '¡Padre! ¿Qué está haciendo?'. Y yo le dije: '¡Nada!'. El hombre tendido empezó a respirar", contó el P. Higgins.