PARIS,
Unas 2 mil personas asistieron este martes 2 de agosto al funeral realizado en la Catedral de Rouen para dar el último adiós al P. Jacques Hamel, el sacerdote de 84 años asesinado en su iglesia en Francia por dos terroristas del Estado Islámico.
La Misa fue seguida por una gran cantidad de fieles a través de una pantalla gigante en las afueras de la Catedral donde recordaron al presbítero asesinado el pasado 26 de julio.
En su homilía, el Arzobispo Dominique Lebrun dijo que "el padre Jacques Hamel no debe temer a Dios. Se presenta ante Él con sus obras justas. Es cierto además que nosotros no podemos juzgar el corazón de nuestro hermano, ¡pero tremendo testimonio que ha dado no se puede equivocar!"
"El Padre Jacques Hamel tenía un corazón sencillo. Era el mismo en familia, con sus hermanos y hermanas, con sus sobrinos y sobrinas, en medio de su ciudad con sus vecinos, en su comunidad cristiana con los fieles".
El Arzobispo exclamó luego: "¡58 años de sacerdote! 58 años de servicio a Jesús como presbítero, servidor de la palabra, de su Eucaristía y de su caridad. Yo me siento pequeño".