CRACOVIA,
Este sábado 30 de julio, fuera del programa de actividades de la JMJ, el Papa Francisco visitó a los jesuitas polacos de Cracovia en la víspera de la fiesta de San Ignacio de Loyola que se celebra este domingo.
El sacerdote P. Leszek Gesiak, jefe del programa polaco de Radio Vaticano, aseguró que durante el encuentro con el Santo Padre "se respiró un ambiente familiar y muy fraterno".
"No hubo nada oficial, ningún discurso... El Papa llegó como un hermano que saluda al otro. Saludó a cada uno y conversamos. Hubo un diálogo en el que el Papa respondió a nuestras preguntas y él también nos hizo algunas. Fue un ambiente muy familiar, sentimos que éramos verdaderamente hermanos en el Señor", dijo el P. Gesiak.
El sacerdote contó además que el Pontífice se interesó por sus actividades: "hizo preguntas acerca de la educación, se sentía que quería aprender más de nuestro trabajo en la universidad jesuita. También se reencontró con el provincial de los jesuitas de Polonia, que conoció en la época cuando él era provincial en Argentina; son más o menos de la misma edad. Han hablado y evocado algunos recuerdos de la Congregación de tiempo atrás".
"Me gustó mucho que el Papa nos haga recordar, al final de nuestra reunión, que hoy tenemos la víspera de la fiesta de San Ignacio, el fundador de la Compañía de Jesús, y que además orara con nosotros. Este sentimiento de la comunidad, de ser todos hijos de San Ignacio de Loyola, es algo que me ha tocado y creo que permanecerá. Y si todos somos hijos de San Ignacio, tendremos este lenguaje en común para compartir", concluyó.
Según el P. Antonio Spadaro, jesuita director de la Civiltà Cattolica en Roma, que también estuvo presente, estos encuentros fuera de programa, simples y familiares, "se han convertido en algo habitual, porque el Papa encuentra siempre –o casi siempre– a los jesuitas durante sus viajes".