PARIS,
Los obispos de Francia hicieron un llamado a la unidad y solidaridad tras el atentado terrorista que ayer dejó 84 muertos y 100 heridos en el balneario de Niza, ubicado al sur del país, y aseguraron que esta barbarie es intolerable.
El autor del atentado ha sido identificado como Mohamed Lahouaiej Bouhlel, un franco-tunecino de 31 años abatido por la policía francesa tras arrollar a decenas de personas que asistían a un espectáculo de fuegos artificiales por el Día Nacional de Francia.
"Nuestro país fue golpeado mientras vivía un momento de unidad nacional. Ahora más que nunca la solidaridad nacional debe ser más fuerte que el terrorismo. En medio del dolor debemos tener la certeza de que la unión es superior a la división", expresaron los obispos en un comunicado publicado hoy.
Los obispos convocaron a los franceses a unirse en oración por las víctimas este 17 de julio en todas las Misas. "Esta tragedia se añade a la triste lista de actos terroristas que entristecen nuestro país y a otros países del mundo luego de varios meses. Sea cual fuere el motivo, esta barbarie es inaceptable, intolerable", señalaron.
Por su parte, el Obispo de Niza, Mons. André Marceau, dirigió un mensaje de consuelo a los ciudadanos y les recordó que "no están solos".
"Es necesario guardar el mensaje de paz y de consuelo en nuestro corazón. Les digo a los nizardos que no están solos", dijo a través de RCF (Radio Chrétienne Francophone).