SANTIAGO DE CHILE,
El abogado chileno y director ejecutivo de la plataforma Comunidad y Justicia, Tomás Henríquez, calificó como una "farsa" y una "traición" la "solución amistosa" que firmó el Estado chileno y el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), el pasado 11 de junio.
El acuerdo fue mediado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y puso fin a la demanda internacional que interpuso el Movilh en 2012 contra el Estado por denegar el matrimonio a tres parejas homosexuales.
Henríquez, experto en Derecho Internacional de los Derechos Humanos por la Universidad de Georgetown, aseguró a través de una columna publicada el 5 de julio en el Mostrador que los detalles del acuerdo firmado por el Movilh y el Estado hace "más evidente que el Gobierno ha obrado dolosamente".
Los "compromisos" firmados por el Gobierno en favor del lobby gay fueron: presentar una propuesta de reforma al matrimonio, reformar la Ley Zamudio (contra la discriminación), establecer la adopción homoparental y el acceso pagado a la fertilización asistida y una ley de reconocimiento y protección al derecho a la identidad de género, entre otros.
"O el Estado presentó a los peores negociadores del mundo ante la Comisión o, simplemente, se trata de la más descarada maniobra para hacer pasar como un acuerdo internacional lo que a todas luces es un 'arreglín' del Gobierno para enchufar la agenda de uno de los grupos de presión más poderosos de Chile (lobby gay)", denunció.
"Los términos de este acuerdo espurio pueden ser queridos por el Gobierno, pero de ninguna forma obligan al Estado a aprobar estas iniciativas, ni menos obligan a los legisladores a prestar su voto favorable", arguyó.