ROMA,
Karen King, la historiadora de la Universidad de Harvard (Estados Unidos), que en 2012 causó revuelo al afirmar que existía un "Evangelio de la esposa de Jesús", según un papiro copto, admitió cuatro años después que era falso y que su fuente era Walter Fritz, un individuo que ha incursionado en la egiptología, venta de autopartes y en la producción de películas pornográficas.
King, que enseña Historia Eclesial, dijo que llegó a esta conclusión luego de leer la investigación de The Atlantic sobre el origen del mencionado papiro, diciendo que "inclina la balanza hacia la falsificación".
Fritz era la pieza perdida de un rompecabezas que había confundido por cuatro años al mundo académico sobre la autenticidad del papiro cuyo tamaño es de 4,5 centímetros de alto por 9 centímetros de largo, con una escritura que sería del copto antiguo y que, según afirmaban, iba a afectar al cristianismo.
Sin embargo, el mismo Fritz envió una carta al periodista de The Atlantic para revelarle que era el dueño del papiro. "Yo, Walter Fritz, certifico que soy el único propietario de un fragmento de papiro (...) que fue llamado 'Evangelio de la esposa de Jesús'".
"Garantizo que ni yo, ni ningún tercero ha inventado, alterado o manipulado el fragmento y/o su inscripción de manera alguna desde que fue adquirido por mí. El dueño anterior no dio indicaciones de que el fragmento fue manipulado".
King obtuvo el papiro en 2011, acompañado de la copia de un contrato de venta firmado, que a la vez mostraba que Fritz se lo había comprado en noviembre de 1999 a un hombre llamado Hans Ulrich Laukamp, a quien conoció en Alemania y con quien tenía negocios conjuntos.