ROMA,
En la tarde de este sábado, el Papa Francisco acudió a visitar Villa Nazaret, en Roma, sede de la Fundación Comunidad Domenico Tardini, que acoge y brinda oportunidades de educación a los niños y adolescentes con un desempeño académico superior que son huérfanos o que provienen de familias pobres.
A su llegada fue recibido por una multitud de niños, hijos de familias de estudiantes y de antiguos alumnos que provenientes de muchos países del mundo quisieron estar presentas en la visita del Pontífice.
Entre los que le recibieron también estaba el Cardenal Achille Silvestrini, quien logró que este lugar se convierta en la institución que ha llegado a ser.
En la capilla, el Papa, acompañado de varios sacerdotes, estudiantes y el personal del lugar, escuchó el Evangelio del Buen Samaritano. Francisco lo comentó brevemente y después explicó que "había escuchado noticias sobre Villa Nazaret, pero no lo conocía bien". "Después me han dicho que es un lugar donde se favorece el testimonio. Aquí se viene no para hacer carrera ni para ganar dinero, sino para otras muchas cosas… para seguir las huellas de Jesús y dar testimonio de Jesús".
Francisco invitó a "sembrar testimonio en el silencio, sin explicaciones, con los gestos retomar el lenguaje de gestos". "El testimonio pasa y se va. Tú lo dejas ahí y va. Solo el Señor lo cuida, lo hace crecer, como hace crecer la semilla", afirmó.
"Deseo que esta obre continua siendo una obra de testimonio, una casa de testimonio para todos, para todos, de testimonio a la gente que se acerca o que escucha hablar".