DENVER,
Christina Fischer decidió entregar a su bebé en adopción apenas diera a luz porque no tiene recursos para mantenerla. Una pareja esperaba a su hija pero huyeron del hospital cuando descubrieron que la bebé presenta malformaciones genética. En ese momento, Christina decidió quedarse con ella.
En declaraciones a Northwest Florida Daily News, Christina dijo que al enterarse de que estaba embarazada, decidió no abortar a su bebé sino darla en adopción porque no estaba en condiciones de criarla. Ya tenía otra hija que mantener, no contaba con la ayuda del padre biológico, no tiene una casa y vive en una zona de caravanas en Florida.
A través de una agencia consiguió padres adoptivos y los análisis prenatales no arrojaron discapacidad o malformación alguna.
"Los médicos no detectaron nada. Sólo me dijeron que sus orejas eran pequeñas", comentó. Cuando dio a luz el 11 de enero de este año, los médicos dijeron que Abigail Lynn tenía una rara enfermedad genética conocida como el síndrome de Treacher Collins. Esta afecta a los huesos y tejidos faciales causando malformaciones.
Para Christina su hija estaba perfecta, pero la madre adoptiva no pensó lo mismo. "Salió llorando del hospital y nunca volví a saber de ella", comentó. "Entonces me di cuenta de que la bebé estaba destinada a ser mía".