CARACAS,
La crisis económica y social que vive Venezuela ha generado una gran escasez de medicamentos. Los médicos del Hospital Central de Maracay, en la región central del país, han decidido recurrir al Papa Francisco y a la Iglesia Católica buscando una forma de solucionar el problema.
Según informa la agencia vaticana Fides, el Dr. Martín Graterol, traumatólogo, como vocero del equipo médico del Hospital Central de Maracay, remitió cartas al Papa Francisco y al Obispo de Maracay, Mons. Rafael Ramón Conde Alfonzo, solicitando su intercesión "para permitir lo más rápidamente posible y con la ayuda de Dios, que se solucione el grave problema de la falta de suministros médicos que tenemos en los hospitales".
A fines de mayo la tragedia de la escasez de medicinas se convirtió en noticia internacional, al conocerse la muerte de Oliver Sánchez, un niño de 8 años que conmovió a millones al salir a las calles con una pancarta pidiendo curarse ante la escasez de medicinas.
En marzo de 2016, el Arzobispo de Coro, Mons. Roberto Lückert, recurrió a las redes sociales para pedir un medicamento que ya no se podía encontrar en las farmacias del país. En Venezuela "se está muriendo la gente por falta de medicamentos", dijo en esa ocasión Mons. Lückert a ACI Prensa.
La Iglesia en Venezuela ha solicitado repetidamente –sin respuesta– al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que facilitar un corredor humanitario para que Cáritas, con ayuda internacional, ingrese al país alimentos, medicinas y otros insumos necesarios.
Tras recibir las cartas de mano del Dr. Graterol, Mons. Conde Alfonzo destacó que hay venezolanos en diversas partes del mundo dispuestos a iniciar una campaña de recojo de medicamentos para enviarlos a su país natal. Pero destacó que el problema se resolvería pronto si el gobierno venezolano permitiera el ingreso de esos fármacos al país.