VATICANO,
El Papa Francisco recibió este sábado a una delegación del Centro Internacional del Diaconado en ocasión del 50 aniversario de su institución y recordó que los diáconos "son el rostro de la Iglesia en la vida cotidiana, de una comunidad que vive y camina en medio de la gente y donde no es más importante quien manda, sino quien sirve".
Francisco centró su discurso en el mandamiento de Jesús "Amaos como yo os he amado". "En el amarse los unos a los otros los discípulos continúan la misión por la cual el Hijo de Dios ha venido al mundo".
El Papa dijo que los discípulos "comprenden que, ayudados por el Espíritu Santo, este mandamiento implica el servicio a los hermanos y a las hermanas". Por ello, "para poder ocuparse correctamente de las personas los apóstoles eligen algunos 'diáconos', es decir, servidores".
"Los diáconos manifiestan de modo particular el mandamiento de Jesús: imitar a Dios en el servicio a los otros, imitar a Dios que es amor y nos sirve".
El Pontífice aseguró que "el modo de actuar de Dios, su actuar con paciencia, benevolencia, compasión y disponibilidad para hacernos mejores debe distinguir también a todos los ministros: los Obispos como sucesores de los Apóstoles, los sacerdotes, sus colaboradores y los diáconos".
"Los diáconos son el rostro de la Iglesia en la vida cotidiana, de una comunidad que vive y camina en medio de la gente y donde no es más importante quien manda, sino quien sirve".