Santa Úrsula Ledóchowska fue una religiosa austriaca, fundadora de diversas iniciativas evangelizadoras, como la Congregación de las Religiosas Ursulinas del Sagrado Corazón de Jesús Agonizante -la más importante-, así como de centros de formación y enseñanza.
Una de las peculiaridades del apostolado de esta santa fue su vínculo con la Compañía de Jesús y otras instituciones de la Iglesia. Como explicó el postulador de su causa de canonización, P. Paolo Molinari, "era hermana de Vladimiro Ledóchowski, que fue prepósito general de la Compañía hasta 1942, y hermana de María Teresa Ledóchowska (beatificada en 1975), fundadora del Sodalicio de San Pedro Claver para sostener las misiones en África. Tuvo también un tío que había sido Cardenal".
Santa Úrsula nació el 17 de abril de 1865 en Loosdorf (Austria). Se mudó a Cracovia (Polonia) en 1886 y entró en el convento de las madres ursulinas. Al hacer sus votos en 1889, tomó el nombre de María Úrsula de Jesús.
Su servicio se caracterizó por la dedicación a la educación y por su sensibilidad ante las necesidades de los menos favorecidos. Cinco años después de realizados los votos, sería elegida superiora de su convento.
Con la bendición del Papa Pío X, en 1907, partió acompañada de otra religiosa a realizar una misión apostólica a Rusia, un país en el que las hostilidades a la Iglesia Católica iban en aumento. A pesar de las dificultades, ambas realizaron una intensa labor educativa y de formación católica. Gracias a ese esfuerzo pastoral, se crearía el noviciado de San Petersburgo, en el que Úrsula sería nombrada superiora.
Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, tuvo que trasladar su comunidad -ahora con más integrantes- primero a Suecia y luego a Dinamarca. En el interín, la Santa Sede le concedió el permiso para que el grupo de religiosas a su cargo dejen de formar parte de la Orden de Santa Úrsula y se conviertan en las "Hermanas Ursulinas del Sagrado Corazón de Jesús Agonizante".