SANTIAGO DE CHILE,
La Constitución es la ley fundamental de un Estado que define los derechos y deberes de los ciudadanos y regula los poderes e instituciones políticas, por lo que su modificación produce efectos de gran magnitud en la vida de todas las personas independientemente de la religión que profesen.
Es por esto que ante la próxima reforma a la constitución en Chile, la Iglesia inició un proyecto de difusión informativa que busca incentivar la participación de los católicos en el debate y promover los derechos a favor de la vida, la familia, la libertad religiosa, entre otros aspectos.
"¿Qué necesito saber y hacer?" es el folleto de 10 carillas, con imágenes y textos explicativos sobre la reforma constitucional, que comenzó a difundir el Arzobispado de Santiago, en el que plantea que "como ciudadanos y católicos, tenemos un compromiso de buscar y promover la verdad en la sociedad".
La actual constitución de Chile es de 1980, con dos reformas de 1989 y 2005. El oficialismo y otros sectores de la sociedad cuestionan la legitimidad de esta ley, ya que fue dictada bajo la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990) donde se cometieron graves violaciones a los derechos humanos.
El Gobierno de Michelle Bachelet propuso un cronograma para debatir cambios a la Constitución durante 2016. Los chilenos están convocados a diálogos ciudadanos cuyas conclusiones serán entregadas a la mandataria, quien las someterá luego a debate en el Congreso.
"Es la primera vez en que los chilenos han sido directamente convocados a definir la ley fundamental. Si asumimos que la convocatoria es genuina y de buena fe, incluso quienes consideran innecesario reformarla tienen un espacio para decirlo", sostiene el texto del Arzobispado.