BUENOS AIRES,
El Observatorio de la deuda social (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA) publicó un informe titulado "Pobreza y desigualdad en la Argentina urbana 2010-2015" donde señalan que la tasa de pobreza en el país aumentó del 29 por ciento al 34,5 por ciento desde diciembre de 2015 al mes de marzo de este año.
El informe indicó también que la tasa de indigencia (falta de techo, alimentos, vestido y recursos básicos para sobrevivir) ha crecido de 5,3 a 6,9 por ciento como consecuencia de la inflación.
El doctor Agustín Salvia, investigador en jefe del ODSA, anunció que la tasa de pobreza habría aumentado de 29 por ciento al 34,5 por ciento en el mismo periodo y que tendría un piso de 32,6 por ciento en la primera parte del mes de abril. En números, significaría que habría "1,4 millón más de pobres, cerca de 13 millones de personas en situación de pobreza".
Salvia dijo en una conferencia de prensa que estas predicciones "no toman en cuenta otros factores de riesgo como las cesantías o pérdidas de empleo ocurridas en el marco de una economía inflacionaria y afectada por ajustes macroeconómicos, ni los recientes anuncios de incrementos en materia de transporte y servicios domiciliarios".
En ese sentido, "cabe suponer que las proyecciones presentadas puedan estar subestimando las tasas de indigencia y de pobreza urbana, representando las mismas apenas el piso de la eventual situación social actual".
Asimismo, advirtió que "si al menos en el corto plazo no se logra controlar los aumentos de precios en productos y servicios básicos y reactivarse la demanda de empleo, se estará cada vez más lejos de una mejora genuina en la distribución del ingreso y difícilmente podrá revertirse la tendencia ascendente que están registrando las tasas de indigencia y de pobreza urbana".