En una misiva remitida a finales de febrero, más de 51 congresistas criticaron al alto comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, por promover el aborto como una solución a los casos de microcefalia presuntamente relacionados con el virus Zika. Los parlamentarios subrayaron además que "ningún tratado de las Naciones Unidas reconoce un derecho al aborto".
"Como miembros del Congreso de los Estados Unidos que estamos consistente y sinceramente inspirados por la belleza y la preciosidad de la vida humana, nos turbó leer el comunicado de prensa del 5 de febrero de 2016 de la Comisión sobre Derechos Humanos de las Naciones Unidas, sobre la reciente propagación del virus Zika y sus implicaciones para prácticas abortivas".
En el comunicado de la oficina que dirige Zeid Ra'ad Al Hussein se pidió a los gobiernos de los países afectados por el Zika proveer a las mujeres de "servicios e información de salud sexual y reproductiva", y entre estos "servicios de aborto seguro".
Citado en el comunicado, el alto comisionado para los derechos humanos de la ONU exigió que "las leyes y políticas que restringen su acceso a estos servicios deben ser urgentemente revisadas".
Desde mayo de 2015, el virus zika –que se contagia principalmente a través de la picadura de un mosquito– se ha propagado por Brasil, la mitad de América del Sur, gran parte de Centroamérica y México.
A pesar de diversos reportes, principalmente originados en Brasil, no hay una conexión exacta entre la infección del virus Zika en mujeres embarazadas y el desarrollo de microcefalia en los bebés en gestación.