ROMA,
Cuatro religiosas de las Misioneras de la Caridad, la Congregación fundada por la Beata Madre Teresa de Calcuta, fueron masacradas este viernes junto a otras doce personas por presuntos terroristas que ingresaron al convento de Aden (Yemen), donde funcionaba el albergue de ancianos que administran las monjas.
La agencia vaticana Fides informó que la superiora del convento se libró de la muerte. De las monjas asesinadas dos eran de Ruanda, una de la India y otra de Kenia. Entre las víctimas también están el chofer y colaboradores del albergue que atendía a unos 80 ancianos y discapacitados.
La prensa informó que los atacantes usaron como pretexto ser parientes de algunas de las ancianas. Ya dentro de la casa pasaron por cada habitación y se llevaron a los trabajadores y religiosas, les ataron las manos y luego los asesinaron con tiros en la cabeza. Hasta el momento no hay noticias del sacerdote indio salesiano Tom Uzhunnalil, que residía en el convento de las hermanas, después de que la iglesia donde vivía fuese saqueada e incendiada.
Según las fuentes de seguridad de este país, ubicado al sur de Arabia Saudita, el ataque fue perpetrado por extremistas musulmanes que acusan a la congregación de hacer proselitismo cristiano.
Este es el segundo ataque que sufren las misioneras de la caridad en este país de mayoría musulmana. La primera vez ocurrió en julio de 1998, cuando hombres armados atacaron su centro de cuidados para discapacitados en la ciudad de Al Hodeida, a orillas del mar Rojo, donde murieron dos enfermeras, una india y otra filipina.
Desde el año pasado Yemen sufre un sangriento conflicto entre el movimiento rebelde chiita de los hutíes contra el gobierno del sunita Abdo Rabu Mansur Hadi y una coalición de países árabes encabezada por Arabia Saudita, que lleva a cabo una ofensiva aérea contra los insurgentes desde 2015. Este conflicto ha dejado hasta el momento 3.000 civiles muertos.