VATICANO,
Esta mañana, el sacerdote franciscano Dhiya Azziz, víctima de dos secuestros en Siria, participó en la Misa que el Papa Francisco celebró en Santa Marta y pudo saludar al Pontífice.
El P. Azziz tiene 42 años y es originario de Qaraqosh, Irak.
El sacerdote es párroco de Yacoubieh en Siria. El pasado 28 de diciembre la Custodia de Tierra Santa alertó que desde el 23 de diciembre se había perdido todo contacto con el sacerdote franciscano, quien regresaba a su parroquia de Yacoubieh tras haber estado en Turquía, donde había visitado a los miembros de su familia que viven como refugiados luego que el Estado Islámico tomara Qaraqosh.
El P. Azziz fue liberado a inicios de enero y los detalles de su cautiverio se mantuvieron en reserva. Fue la segunda vez que sufrió un secuestro. El primero ocurrió el 4 de julio del año pasado también en Yacoubieh. Fue liberado seis días después.
Según informó Radio Vaticano, desde el inicio del conflicto sirio, las milicias yihadistas y los grupos de combatientes han tenido entre sus blancos de secuestro a líderes de la comunidad cristiana. Los obispos ortodoxos Boulos Yazigi y Mar Gregorios Youhanna Ibrahim, fueron secuestrados el 22 de abril de 2013 y su paradero es aún desconocido. Lo mismo ocurre con el sacerdote Paolo Dall'Oglio, secuestrado en julio de 2013.
El año pasado, el sacerdote Jacques Mourad, de la Iglesia siro-católica, estuvo cinco meses en poder del Estado Islámico hasta que logró escapar.