VATICANO,
Aunque diversos medios de comunicación han difundido informaciones según las cuales el Papa Francisco habría admitido el uso de anticonceptivos ante el virus del zika, una mirada con detenimiento a sus declaraciones permite comprender mejor lo que dijo en la rueda de prensa que concedió en el avión que lo llevó de México a Roma.
El Santo Padre se refirió al tema del zika y la emergencia sanitaria actual y resaltó que "el aborto no es un mal menor: es un crimen. Es echar fuera a uno para salvar a otro. Es lo que hace la mafia. Es un crimen, es un mal absoluto".
Francisco recordó luego que años atrás "Pablo VI, el grande, en una situación difícil en África permitió a las monjas usar anticonceptivos para casos en los que fueron violentadas" y que "evitar el embarazo no es un mal absoluto. En ciertos casos, como en este, como en el que he nombrado de Pablo VI, era claro".
[Puede leer aquí la respuesta completa del Papa Francisco sobre este tema]
Al respecto, el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, P. Federico Lombardi, dijo a ACI Stampa –agencia en italiano del Grupo ACI– que "el Papa ha distinguido fuertemente entre el aborto, un crimen, y la anticoncepción. Recordando el ejemplo de Pablo VI, ha evidenciado que en casos de particular gravedad una práctica, obviamente no abortiva, puede ser considerada".
Sobre el tema, la Dra. Melissa Moschella, profesora de filosofía de la Catholic University of America (Estados Unidos) explicó que cuando se ha referido a evitar el embarazo en caso de zika, el Papa no necesariamente ha implicado los anticonceptivos sino que puede haberse referido a la regulación natural de la fertilidad.