CIUDAD DE MÉXICO,
El Vicario General de la Diócesis de Ciudad Juárez, Mons. José René Blanco, señaló que el Papa Francisco "quiere ayudarnos a cambiar nuestra manera de mirar el fenómeno de la migración" con su visita a esta ciudad fronteriza que se ha convertido en la puerta de entrada de miles de familias hacia Estados Unidos.
En declaraciones recogidas por Laicos en Misión Permanente, Mons. Blanco recordó el origen migrante del Santo Padre, cuyos antepasados dejaron Italia en busca de un mejor futuro en Argentina; una experiencia que ha hecho que el Pontífice sea "muy sensible a la necesidad de tantas familias migrantes".
"Creo que el Papa quiere ayudarnos a ver toda la riqueza espiritual que aportan al mundo las familias migrantes", señaló, y destacó que haya sido una familia migrante la que "nos dio un Papa".
Además, indicó que en Estados Unidos "hay 25 millones de mexicanos, la cuarta parte de nuestro país está trabajando allá. El Papa quiere ayudarnos a cambiar nuestra manera de mirar el fenómeno de la migración".
Sobre la elección de Juárez como parte de la visita, el Vicario General dijo que se debe a que es una de las diócesis "a las que nunca se había visitado".
"El Papa ha hablado mucho de que estamos llamados a ser una iglesia misionera en salida permanente hacia las periferias existenciales, y nuestra frontera, Ciudad Juárez, en medio de 3.500 kilómetros entre Estados Unidos y México - la frontera más grande entre un país del primer mundo y un país del tercer mundo como nosotros-, es muy significativa. Es una periferia existencial, donde se reúnen todas las grandes necesidades de la humanidad, las grandes cualidades y los grandes sufrimientos, grandes problemas, grandes desafíos", indicó.