REDACCION CENTRAL,
La International Planned Parenthood Federation (IPPF), matriz de Planned Parenthood Federation of America –acusada de traficar con órganos y tejidos de bebés abortados en sus instalaciones– se ha abocado directamente a promover el aborto en los casos de mujeres embarazadas que resulten infectadas con el virus zika.
El virus zika, por el que la Organización Mundial de la Salud decretó una emergencia sanitaria global el 1 de febrero, es contagiado por la picadura del mosquito Aedes aegypti, el mismo que transmite las enfermedades del dengue y la chikungunya.
Algunos reportes han apuntado a que mujeres embarazadas infectadas con el virus zika podrían transmitir la enfermedad a sus bebés, causando microcefalia, una condición en la que la cabeza del bebé es más pequeña de lo que debería ser. Sin embargo, no hay trabajos científicos concluyentes y los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) han precisado que "se necesitan estudios adicionales para distinguir mejor esta relación".
En declaraciones para la cadena alemana Deutsche Welle (DW), el director general de la IPPF, Tewodros Melesse, aseguró que "el virus del zika debe ser combatido con mejor acceso a la contraconcepción y al aborto seguro así como con medidas contra los mosquitos".
El virus zika ha afectado hasta la fecha a Brasil y gran número de países de América Latina, como México, El Salvador, Honduras, Colombia y Paraguay. En estos mismos países, la IPPF ha invertido grandes cantidades de dinero para promover la legalización del aborto.
Según el reporte financiero de la International Planned Parenthood Federation, en 2014 destinó más de 10 millones de dólares para promover el aborto en América Latina. De estos, más de 731 mil dólares fueron destinados a México.