VATICANO,
El Papa Francisco dedicó la homilía en la Misa de la Casa Santa Marta a la fe y la relación que uno tiene con Jesucristo e invitó a preguntarse '¿cómo es mi fe en Jesucristo?'.
"¿Creo que Jesucristo es Dios, es el Hijo de Dios?", señaló. "¿Y esta fe me cambia la vida?", continuó. "¿Hace que en mi corazón se inaugure este año de gracia, este año de perdón, este año de acercamiento al Señor?".
"La fe es un don", manifestó el Papa. "Ninguno 'merece' la fe. Ninguno la puede comprar. Es un don. 'Mi' fe en Jesucristo, ¿me lleva a la humillación? No digo a la humildad: a la humillación, al arrepentimiento, a la oración que pide: 'Perdóname, Señor. Tú eres Dios. Tú 'puedes' perdonar mis pecados".
"La alabanza. La prueba de que yo creo que Jesucristo es Dios en mi vida, que ha sido enviado a mí para 'perdonarme', es la alabanza: si yo tengo capacidad de adorar a Dios. Alabar al Señor. Es gratuito, esto. La alabanza es gratuita. Es un sentimiento que da el Espíritu Santo y te lleva a decir: 'Tú eres el único Dios'. Que el Señor te haga crecer en esta fe en Jesucristo, que nos perdona, nos ofrece el año de gracia y que esta fe nos lleve a la alabanza".
Francisco pidió entender que "Jesús viene a salvarnos de las enfermedades", pero sobre todo "a salvarnos de nuestros pecados, salvarnos y llevarnos al Padre".
"Fue enviado para esto, para dar la vida por nuestra salvación. Y esto es el punto más difícil de entender". Sucede cuando Jesús se muestra con un poder más grande que el del hombre "para dar ese perdón, para dar la vida, para recrear la humanidad, también sus discípulos dudan".