MÉXICO D.F.,
Al presidir la Misa en el cuarto y último Domingo de Adviento, el Arzobispo Primado de México, Cardenal Norberto Rivera, destacó el rol de la Virgen María en la preparación para la Navidad, pues "si Adviento significa espera de Cristo, María es la 'espera' en persona".
En su homilía del 20 de diciembre, el Cardenal Rivera indicó que "en este tiempo de Adviento la liturgia nos prepara a recibir a nuestro Salvador poniéndonos delante a tres grandes figuras: Isaías, Juan el Bautista y María; el profeta, el precursor y la madre".
"Hoy la Buena Nueva está impregnada por la dulce y silenciosa figura de María Santísima. Ella nos ayuda a intensificar y a concentrarnos en la 'espera'", señaló.
"'Aquel que ha de venir' ya vino y vino por María; el misterio escondido por siglos en el seno del Padre, por nueve meses se escondió en el seno virginal de María", recordó.
El Primado de México dijo que la espera tuvo para María "el sentido realista y delicado que tiene para toda mujer la espera de su niño. Fácilmente nos podemos imaginar a María, en un día como hoy, hace dos mil años, horas antes del acontecimiento del nacimiento del Redentor esperado por siglos".
"Su dulce rostro, lleno de alegría y de ansiedad, por tener en sus brazos y dialogar con Aquel que por nueve meses ya llevaba en su seno. Espera para comenzar una nueva etapa de contemplación, de diálogo y de relación, con Aquel con quien ya tenía una comunión ininterrumpida de amor", dijo.