SANTIAGO,
Ante unos tres mil fieles reunidos en la Basílica de San Pablo Extramuros, 44 Legionarios de Cristo fueron ordenados sacerdotes por el prefecto de la Congregación para el Clero, Cardenal Beniamino Stella, quien consideró a estos nuevos pastores "un don para la Iglesia y para la humanidad".
"Es bueno que mantengan siempre la conciencia de haber sido elegidos… la gracia del primer amor, de donde ha brotado un deseo de hacer cosas grandes", dijo el Cardenal a los nuevos sacerdotes. "Ser elegido de entre los hombres" es "estar constituido a favor de los hombres en las cosas que se refieren a Dios" y en "ser enviado al mundo", agregó.
La ceremonia se llevó a cabo el 14 de diciembre en Roma en el marco del 75 aniversario de fundación de los Legionarios que buscan vivirlo como "un tiempo de alegría, de agradecimiento y de pedir perdón y de perdonar", dijo el director general, P. Eduardo Robles Gil,
Durante la ceremonia de ordenación, el Cardenal Stella también recordó que con la misión que hoy la Iglesia les confía "llega a cumplimiento el camino pedagógico de Dios. Cristo os consagra a sí para daros como un regalo a todos los hombres".
Además, continuó el Purpurado, "en el Jubileo de la Misericordia estáis llamados a ser testigos y ministros de la misericordia. No se cansen de perdonar. Sean perdonadores. No se cansen de perdonar como lo hacía Jesús".
En un comunicado de la congregación, el rector de una de las comunidades de formación de los Legionarios en Roma, P. Ignacio Sarre, señaló que "tener ordenaciones sacerdotales al inicio del Año de la Misericordia nos hacen percibir que el amor de Dios nunca se acaba".