MADRID,
El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, explica en su última carta semanal el sentido del tiempo de Adviento y cómo se puede vivir. De este tiempo litúrgico, que comienza este domingo 29 de noviembre, "podemos esperar gracias abundantes de conversión" también por la especial celebración del Año de la Misericordia.
El Prelado explica que el Adviento es "tiempo de preparación para la venida del Señor"que tiene un doble aspecto: "la venida al final de los tiempos, que coincide con el final de nuestra propia vida; y la venida del Señor en la Navidad, que recuerda y celebra aquella primera venida en carne del Hijo de Dios hecho hombre en el seno virginal de María".
"El centro del adviento es Jesús, no podía ser otro. Jesús presente ya, pero ausente todavía. Celebramos la venida del Señor", asegura.
"María nos puede enseñar mejor que nadie a recibir a Jesús en nuestros corazones, a abrazarlo con amor como lo ha hecho ella y a llevarlo a los demás, como nos lo ha entregado ella", afirma luego el Obispo.
Juan el Bautista, según asegura Mons. Fernández, "nos invita a preparar los caminos del Señor con una actitud penitencial". Por eso subraya que el tiempo de Adviento es también un tiempo de penitencia, "particularmente para purificar la esperanza" "cancelando la memoria del mal ya perdonado" y "depurando los proyectos para que se ajusten a los planes de Dios".
El Obispo define el tiempo de Adviento como "tiempo de gozosa esperanza", por lo que subraya la importancia de comenzar el Año litúrgico "con el deseo de recibir a Jesús".