VATICANO,
El Papa Francisco denunció hoy en Nairobi, capital de Kenia, que el nombre de Dios "no debe ser usado jamás para justificar el odio y la violencia" y también en referencia al terrorismo yihadista advirtió de que a menudo se radicaliza a los jóvenes en nombre de la religión en lugar de ser profetas de paz.
El primer evento que el Papa Francisco tuvo este jueves, en su segundo día de visita al país africano, fue el Encuentro Ecuménico e Interreligioso en el salón de la Nunciatura Apostólica en Nairobi. En él participaron líderes de las diversas confesiones cristianas y de otras tradiciones religiosas de Kenia, como el anglicanismo y el islam.
El Santo Padre destacó que "el Dios a quien buscamos servir es un Dios de la paz" y por tanto "su santo Nombre no debe ser usado jamás para justificar el odio y la violencia".
"Con frecuencia se radicaliza a los jóvenes en nombre de la religión para sembrar la discordia y el miedo, y para desgarrar el tejido de nuestras sociedades. Es muy importante que se nos reconozca como profetas de paz, constructores de paz que invitan a otros a vivir en paz, armonía y respeto mutuo".
Con estas palabras recordó también "los bárbaros ataques" al Westgate Mall, al Garissa University College y a Mandera por yihadistas. El ataque al centro comercial Westgate en 2013 tuvo 69 muertos y 175 heridos, mientras que en el asalto a la Universidad de Garissa se asesinaron a 147 estudiantes cristianos después de ir preguntando su religión a cada uno de los rehenes. A su vez, los repetidos ataques terroristas en Mandera suman más de 130 muertos.