Cada 24 de noviembre damos inicio a la Novena dedicada a San Francisco Javier S.J., don Francisco Jasso Azpilicueta, nacido el 7 de abril de 1506 en Navarra, España. Convertido en misionero de la Compañía de Jesús (jesuitas) viajó a proclamar el Evangelio a Oriente donde encontró la muerte cuando estaba a punto de llegar a la China Continental. Este santo es considerado patrono de las misiones y se le suele llamar ‘el apóstol de las Indias’ (por la connotación que tenía el término en el siglo XVI).
San Francisco Javier falleció el 3 de diciembre de 1552 a la edad de 46 años en la isla de Sanchón (Shangchuan, derivación de São João, San Juan), perteneciente en ese momento al Imperio portugués.
Movido por el deseo de ganar almas para Cristo
Dijo alguna vez el ilustre misionero jesuita: “Si en esas islas hubiera minas de oro, los cristianos se precipitarían allá. Pero no hay sino almas para salvar".
Endomendémonos a su intercesión y anunciemos sin miedo a Cristo vivo, “Camino, Verdad y Vida” para toda la humanidad.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro.