PARIS,
El fin de semana después de los trágicos atentados que han remecido París el pasado 13 de noviembre, miles de fieles se volcaron a las iglesias católicas que abrieron sus puertas para acogerlos y rezar con ellos en estos momentos de dolor.
En las fachadas y rejas de los templos se colocaron afiches con la frase "Pray for Paris" (Oremos por París) y pequeñas pancartas con mensajes de ayuda.
Una de las Iglesias que se sumó a esta iniciativa fue la parroquia de Saint- Denys du Saint Sacrament, que está cerca del teatro Bataclán, en donde fueron asesinadas más de 100 personas.
El Párroco Roger Tardy, y su vicario, P. Maxime Deurbergue, abrieron el templo y recibieron durante buena parte del fin de semana a todos los que quisieran conversar. Lo mismo hizo un grupo de seminaristas de primer y segundo año que acoge la parroquia.
El P. Tardy narró que, incluso, muchos de los visitantes se consolaban con algo sencillo como prender una vela. "Este gesto es una plegaria natural para quienes no saben cómo orar", dijo el Párroco a Famille Chrétienne.