VATICANO,
En su catequesis de hoy sobre el sentido de la puerta santa en el Año de la Misericordia, el Papa Francisco alentó a las familias cristianas a ser un signo de la misericordia y la acogida de Dios.
El Santo Padre recordó que "la Sagrada Familia de Nazaret sabe bien qué cosa significa una puerta abierta o cerrada, para quien espera un hijo, para quien no tiene amparo, para quien huye del peligro".
Por ello, el Papa alentó a que "las familias cristianas hagan del umbral de sus casas un pequeño gran signo de la Puerta de la misericordia y de la acogida de Dios".
"Es así que la Iglesia deberá ser reconocida, en cada rincón de la tierra: como la custodia de un Dios que toca, como la acogida de un Dios que no te cierra la puerta, con la excusa que no eres de casa", dijo.
Al llegar al umbral del Año Jubilar de la Misericordia –que se inicia el 8 de diciembre– Francisco señaló que "delante de nosotros se encuentra la gran puerta de la Misericordia de Dios, que acoge nuestro arrepentimiento ofreciendo la gracia de su perdón".
"La puerta es generosamente abierta, pero nosotros debemos valerosamente cruzar el umbral", señaló.