VATICANO,
Hace un año, el Vaticano dio por terminadas una serie de mejoras en la climatización e iluminación de las diferentes salas de los Museos Vaticanos, con especial dedicación a la Capilla Sixtina. Unas labores que han sido todo un éxito y harán que la Capilla más famosa del mundo probablemente no tenga que ser restaurada en el futuro.
Los responsables de los Museos acaban de hacer balance de estas mejoras, junto con las efectuadas en la Capilla Paulina, toda ella dedicada a San Pablo, que de momento permanece cerrada al público puesto que es la capilla privada del Papa.
En una presentación organizada a los medios de comunicación y a diversas personalidades, el director de los Museos, Paolo Paolucci, reconoció que las legendarias pinturas "han superado la prueba con las tórridas temperaturas de este verano". Se refería de esta manera a los meses de julio y agosto de 2015 en los que la mayor parte de Europa, incluida Roma, tuvo que hacer frente a temperaturas más elevadas de lo habitual que podían haber puesto en peligro la conservación del patrimonio artístico.
La presentación tuvo lugar en la Sala Regia de los Palacios Apostólicos, en la que confluyen la Capilla Sixtina y la Capilla Paulina. Las pinturas de la Sixtina son las más famosas de Miguel Ángel: 2.500 metros cuadrados de pintura mural que forman el mayor y más importante conjunto de arte del Renacimiento.
Fotos de Capilla Sixtina, antes y después de la instalación de nueva planta de iluminación. https://t.co/oneZoRphgC pic.twitter.com/xaLXLJi2HP
- ACI Prensa (@aciprensa) noviembre 5, 2015