ROMA,
"No nos dejen solos", fue el llamado que lanzó Cáritas Jerusalén a los cristianos de todo el mundo, a quienes exhortaron a no cancelar las peregrinaciones a Tierra Santa a pesar de las fuertes medidas de seguridad que Israel ha impuesto por los últimos choques entre las fuerzas israelíes con grupos palestinos y que ha causado la muerte de 39 personas.
"No negamos que la situación es difícil", señaló Cáritas Jerusalén en un comunicado enviado a la agencia vaticana Fides, "pero hacemos un llamamiento a todos nuestros hermanos y hermanas cristianos a venir y no tener miedo: no nos dejen solos".
En el texto, Cáritas señaló que las medidas de seguridad están causando la cancelación de las peregrinaciones, "lo que significa el colapso masivo del sector turístico, especialmente en Belén, donde la mayor parte de las personas dependen de este sector para asegurarse el acceso a los medios de subsistencia".
La cancelación de los permisos para entrar en Jerusalén o Israel "dará lugar a un aumento del desempleo y de dificultades económicas para miles de familias trabajadoras" que dependen totalmente de lo que pueden ganar a través de su trabajo diario, indicó.
Según informó la agencia EFE, entre las medidas aprobadas el 14 de octubre está cerrar los barrios palestinos de Jerusalén Este –que Israel ocupa desde 1967-, y aumentar las fuerzas operativas de la policía y contratar a 300 guardias de seguridad para el transporte público en Jerusalén.