VATICANO,
El Papa Francisco presidió esta mañana la Misa en la Casa Santa Marta y en su homilía habló del virus de la hipocresía que lleva "a la gente a amar más las tinieblas que la luz". La hipocresía además "enferma y te hace morir", pero se puede evitar con ayuda de la oración.
El Pontífice explicó que la hipocresía no tiene un color concreto, sino que seduce en "claroscuro", con "la fascinación de la mentira".
El Evangelio del día, de San Lucas, relata cómo miles de personas se agolpaban –y se pisoteaban– para escuchar a Jesús y él dirigiéndose primero a sus discípulos dijo: "Cuidado con la levadura de los fariseos, o sea, con su hipocresía. Nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, nada hay escondido que no llegue a saberse".
El Pontífice comentandolo afirmó que la levadura "es una cosa pequeñísima" y de la forma que habla Jesús es como si quisiera decir que es un "virus". Como si fuese "un médico" que dice "a sus colaboradores" que tengan cuidado porque hay riesgo de "contagio".
"La hipocresía es ese modo de vivir, de actuar, de hablar que no es claro. Quizás sonríe, quizás está serio… no es luz, no es tiniebla… se mueve de una manera que parece no amenazar a ninguno, como la serpiente, pero se fascina por el claroscuro".
"Tiene esa fascinación de no tener las cosas claras, de no decir las cosas claramente; la fascinación de la mentira, de las apariencias… A los fariseos hipócritas Jesús les decía también que estaban llenos de sí mismos, de vanidad, que a ellos les gustaba pasear en las plazas haciendo ver que eran importantes, gente culta…", explicó Francisco.