VATICANO,
El Papa Francisco alertó sobre los peligros que corre una persona cuando le abre las puertas al demonio, una oportunidad que aprovecha para "anestesiar" la conciencia e irse apropiando poco a poco de ella.
En la homilía que pronunció en la Misa en la Casa de Santa Marta a primera hora de la mañana y antes de acudir a la Asamblea del Sínodo sobre la Familia, el Pontífice comentó el Evangelio del día en el que Jesús expulsa a un demonio y enumeró algunos peligros que conlleva escucharlo y dejarlo entrar.
El Santo Padre explicó que cuando el demonio ingresa en la consciencia de la persona se hace dueño de ella, "está escondido, viene con sus amigos muy educados, llama a la puerta, pide permiso, entra y convive con ese hombre, su vida cotidiana y, gota a gota, da las instrucciones".
El demonio, con "esta modalidad educada" convence al hombre para "hacer las cosas con relativismo". El padre de la mentira "tranquiliza la conciencia, anestesia la conciencia, esto es un gran mal".
"Cuando el espíritu malvado logra anestesiar la conciencia se puede hablar de una verdadera victoria suya, se convierte en el dueño de esa conciencia".
"¡Pero esto ocurre en todas partes!". "Sí, todos, todos tenemos problemas, todos somos pecadores, todos… y en el 'todos' existe el 'ninguno'. 'Todos, pero yo no'. Y así se vive esta mundanidad que es hija del espíritu malvado".