VATICANO,
El Papa Francisco recibió esta mañana a la Fundación del Banco de Alimentos de Italia en el Aula Pablo VI del Vaticano y denunció que el hambre se ha convertido en un "verdadero escándalo". A su vez, pidió a los miembros que se acerquen a los necesitados con amor, vean en ellos al mismo Cristo y se conviertan en sus "amigos" y "hermanos".
Francisco comenzó su discurso agradeciendo la tarea de repartir alimentos, de manera voluntaria, a los más necesitados.
En este sentido les pidió: "no olviden que son personas y no son números, cada uno con su carga de dolor que a veces parece imposible llevar", expresó.
"Mírenles siempre a la cara, denles la mano, vean en ellos la carne de Cristo y ayúdenles también a reconquistar su dignidad y a ponerse en pie".
"Les animo a ser hermanos y amigos para los pobres, a hacerles sentir a ellos que son importantes a los ojos de Dios".
El Papa denunció que "el hambre ha asumido hoy las dimensiones de un verdadero 'escándalo' que amenaza la vida y la dignidad de muchas personas: hombres, mujeres, niños y ancianos".