FILADELFIA,
Durante el Festival de las Familias realizado esta noche en Filadelfia (Estados Unidos), el Papa Francisco escuchó a Lesya Borys, una madre ucraniana cuyo esposo la abandonó con dos hijos, uno de ellos aquejado con parálisis cerebral. Sin embargo, afirmó que "la adversidad, nos llena con felicidad" y que goza de la bendición de Dios y la protección de la Virgen María.
En su testimonio, la madre afirmó que Borys, su hijo con parálisis cerebral, "es una bendición", quien tiene la habilidad de ayudar a otros a ver que, a pesar de estar "enfermo", es feliz "con los retos que enfrenta", como cuando hizo de intérprete entre ella y los médicos que lo trataban.
"Borys trabaja muy duro para ser independiente y es una inspiración para todos nosotros", afirmó Lesya, cuyo padre falleció cuando tenía cuatro años y fue su madre, Yevhenia, quien la formó en la fe católica.
"En Ucrania la vida no es fácil, especialmente teniendo un hijo discapacitado, a pesar de tener lo que era considerado un trabajo bien pagado. Pero a pesar de esto, continué con mi fe en Dios y recé por la gracia de perseverar y ser fuerte", expresó.
Sin embargo, las cosas se pusieron más difíciles cuando estaba emigrando hacia los Estados Unidos. "Mi esposo dejó la familia" y esto trajo más problemas emocionales y financieros, "pero siempre recordé que Dios tiene un plan para nosotros", indicó.
Entonces su madre llegó a los Estados Unidos para ayudarla. "Dios realmente nos ha bendecido de muchas maneras. Mi hijo mayor Bohdan se ha graduado del college y ahora planea ser sacerdote. Estoy muy orgullosa de él. Mi querido hijo Borys tiene ahora 17 años y lo amo mucho. Me inspira y hace tan feliz ver que él no se limita por su discapacidad. De hecho, Borys desea fuertemente crear programas de computadoras para niños con discapacidades similares a las de él".