Santiago de Cuba,
El Papa Francisco recordó que el alma de Cuba fue forjada entre dolores y penurias "que no lograron apagar la fe" y desafió a los cubanos a "vivir la revolución de la ternura como María", en la Misa que presidió en el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre.
La Virgen de la Caridad del Cobre es la Patrona de Cuba y es considerada por creyentes y no creyentes como "símbolo de la cubanía". Según el gobierno cubano es la imagen más venerada en toda la isla. Mide unos 35 centímetros sin contar su base ni la corona y fue hallada hace 400 años por tres niños en la bahía de Nipe.
En la primera Misa de un Pontífice celebrada dentro del histórico templo cubano en la ciudad de Santiago, el Papa dijo que "estamos invitados a vivir la revolución de la ternura como María, Madre de la Caridad. Estamos invitados a 'salir de casa', a tener los ojos y el corazón abierto a los demás".
En la Misa participó la plana mayor del gobierno de Cuba, incluyendo a Raúl Castro, presidente del Consejo de Estado y de Ministros de la República, que asistió a las tres Misas presididas por el Papa en la isla.
Francisco aseguró que "nuestra revolución pasa por la ternura, por la alegría que se hace siempre projimidad, que se hace siempre compasión que no es lástima, es padecer con para liberar; y nos lleva a involucrarnos, para servir, en la vida de los demás".
"Nuestra fe nos hace salir de casa e ir al encuentro de los otros para compartir gozos y alegrías, esperanzas y frustraciones", señaló.