LA HABANA,
El Papa Francisco exhortó a los sacerdotes a no cansarse de perdonar a los fieles que llegan a confesar sus pecados en el confesionario. "Ese o esa que están ahí son el más pequeño y por lo tanto es Jesús", aseguró.
Al presidir el rezo de las Vísperas junto a sacerdotes, religiosos, religiosas y seminaristas en la Catedral de La Habana (Cuba), el Santo Padre indicó que el confesionario es "un lugar privilegiado para el sacerdote" para encontrarse con "ese último, ese mínimo, el más pequeño" necesitado de su ayuda.
"Ahí (es) cuando ese hombre o esa mujer te muestra su miseria", explicó el Papa, y advirtió que "ojo que es la misma que tienes tú y que Dios te salvó ¿eh? de no llegar hasta ahí".
Cuando esa persona te muestra su miseria, pidió el Papa a cada sacerdote, "¡por favor! no lo retes, no la retes, no lo castigues".
"Si no tienes pecado, pues tírale la primera piedra, pero solamente con esa condición, sino piensa en tus pecados y piensa que tú puedes ser esa persona, piensa que tú potencialmente puedes llegar más bajo todavía y piensa que tú en ese momento tienes un tesoro en las manos, en tus manos, que es la misericordia del Padre".
Francisco pidió a los sacerdotes que "no se cansen de perdonar, sean 'perdonadores', no se cansen de perdonar como lo hacía Jesús. No se escondan en miedos o en rigideces".