MADRID,
El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, reflexionó sobre el pasaje del Evangelio en el que los discípulos discutían sobre quién era el primero en el reino. Al respecto refiere que Jesús les dijo: "quien quiera ser el primero que sea el último y el servidor de todos". "En el seguimiento de Jesús no empezamos siendo perfectos", sino que seguimos a Jesús "a pesar de nuestros pecados" y será Él, "que nos ha llamado a seguirle, será quien completará en nosotros la obra que ha comenzado", dijo.
En su última carta semanal, el Obispo resalta que "Jesús ha recorrido el camino de la humildad, haciéndose esclavo y obediente por amor, hasta dar la vida para que nosotros tengamos vida abundante, y vida eterna".
Recuerda unas palabras de Carlos de Foucauld: "escoge siempre el último puesto y nadie te lo quitará". En ese sentido el Prelado explica que "la tendencia natural es la de escalar. Si, además, esa tendencia está herida por el pecado, la escalada se hace incluso a costa de pisar a otros" y que incluso "se utiliza a los demás para mi propio provecho".
"El egoísmo y la soberbia nunca se sienten satisfechos", afirma y asegura que "en la raíz de todo pecado se encuentra la soberbia y la mentira".
Por eso contrapone el camino de Jesús que el "del servicio que brota de un corazón sencillo y humilde".
Por eso el Obispo de Córdoba recuerda que: "en el seguimiento de Jesús no empezamos siendo perfectos, empezamos a seguirle porque Él nos atrae, a pesar de nuestros pecados. Acoger a Jesús nos irá llevando a ser humildes e incluso a sentir la vergüenza de no serlo. Él, que nos ha llamado a seguirle, completará en nosotros la obra que ha comenzado".