REDACCION CENTRAL,
Un obispo francés condenó enérgicamente el último ataque realizado a inicios de este mes en el cementerio de Labry -ubicado en la región de Lorena al noreste de Francia-, específicamente contra los símbolos cristianos en 40 tumbas.
Este tipo de hechos comenzaron a ocurrir, cada vez con mayor frecuencia, desde el año pasado.
Al respecto, las autoridades del campo santo dieron a conocer un comunicado oficial en el que recuerdan que Mons. Jean-Louis Papin, Obispo de Nancy y Toul, explica que un "cementerio es un lugar sagrado y debe ser respetado. Nada justifica este tipo de actos y estos merecen ser firmemente condenados".
También expresó que no debe haber ninguna confusión o engaño durante las investigaciones de la policía y se unió al dolor de las familias cuyas tumbas de sus seres queridos fueron profanadas.
Por su parte, el P.Gerard Cappannelli, párroco de la iglesia de Sainte Claire, dijo a los medios que los autores de estas profanaciones -que sería un par de adolescentes góticos- deben "respetar a un cementerio como uno se respeta a sí mismo".
De mal en peor